martes, abril 05, 2011

La semana pasada, dos de mis lectores más fieles (y además amigos por quienes siento una gran simpatía) reclamaron actualizaciones en este blog. Las urgencias de la vida moderna hacen que todo sea no solamente más rápido, sino más breve: Twitter se ha convertido recientemente en el depositario de mis ocurrencias, comentarios y tonterías varias. Ha ganado de calle a Facebook, sobre todo, porque en Twitter eres tú el que decide a quién quieres seguir. Además hay menos gente y menos spam.
En fin, que lo bueno de tener lectores fieles es que te reclaman, y en honor a ellos llevo días pensando que necesitaba una excusa para escribir algo aquí. Y esta mañana la he encontrado: es el nuevo disco de Paul Simon, que sale a la venta el 12 de abril y puedes escuchar en su integridad en la web de la radio pública americana, NPR.
La web de NPR es un medio magnífico para escuchar algunas novedades a punto de salir a la venta en el mercado americano: ahí he escuchado recientemente lo nuevo de PJ Harvey, de Bright Eyes... Y, sin ir más lejos, ayer mismo escuchaba el nuevo disco de Panda Bear y esta mañana el nuevo de Low, justo antes de pasar al de Paul Simon. Esta última sucesión es la que me ha llevado a actualizar el blog: los discos de Panda Bear y Low han pasado sin pena ni gloria por mi reproductor. El de Panda Bear sólo me hizo pararme una vez a comentar en voz alta "¡creo que se ha rayado el disco!", y del de Low recuerdo poca cosa, más que alguna ceja levantada cuando Alan Sparhawk se deja llevar por la electricidad y se pone burro.
En cambio, en la primera escucha del disco de Paul Simon (voy por la segunda) no he tenido más remedio que dejar cada dos por tres lo que estaba haciendo y pararme a escuchar: ¡esos arpegios de folk acústico sureño suenan a Fred Neil! ¡Esos arreglos de pianos y violines son puro Van Dyke Parks! ¡Esta canción me recuerda al mejor Randy Newman! ¡Y esa otra a Mark Lanegan! No hay rastro de africanismo (sí de gospel), se ve que la moda le da igual: ¿y qué van a hacer ahora Vampire Weekend?
A diferencia de dos discos que deberían hacerme ilusión e interesarme más, y a pesar de algunos trucos de producción (y de composición) que chirrían un poco más de la cuenta, esta mañana lo nuevo de Paul Simon me ha hecho pararme, escuchar, e incluso escribir esto aquí. Así de inmediato estoy últimamente, escribo a medida que lo pienso. Por eso paso más tiempo en Twitter.